La Fundación Vila Casas, impulsada por el compromiso cultural del mecenas Antoni Vila Casas, no es solo una institución dedicada al arte: es un tributo vivo al talento catalán y a los paisajes que lo inspiran. En el Empordà, dos espacios singulares —el Palau Solterra, en Torroella de Montgrí, y Can Mario, en Palafrugell— ofrecen exposiciones que enlazan el presente artístico con la memoria arquitectónica de la región.
Visitar los museos de la Fundación en el Empordà es entrar en un diálogo entre arte, historia y paisaje. Fundada en el año 2000 como entidad sin ánimo de lucro, la fundación ha trabajado con entusiasmo para promover y conservar el arte contemporáneo catalán.
Palau Solterra: Fotografía contemporánea de Cataluña
En pleno centro de Torroella de Montgrí, se encuentra el museo Palau Solterra, un exquisito palacio renacentista del siglo XV que alguna vez fue la residencia del Conde del pueblo. Ahora este museo de fotografía contemporánea alberga una colección perdurable de más de 300 obras de artistas locales e internacionales. Las imágenes profundizan en una multitud de temas como paisajes, retratos e incluso reflexiones sobre la sociedad contemporánea y el impacto del arte en el mundo actual.
El museo también acoge exposiciones temporales que muestran las obras de artistas emergentes y consolidados, creando un diálogo constante entre diferentes generaciones y estilos fotográficos. Además, su programación incluye actividades culturales como conferencias, talleres y ciclos de música, diseñadas para fomentar el intercambio cultural y la reflexión crítica en torno al arte.
El Palau Solterra es mucho más que un espacio expositivo; es un lugar donde se fusionan la tradición y la modernidad, ofreciendo a los visitantes una experiencia única en un entorno cargado de historia. Su propuesta es un homenaje al poder de la imagen como vehículo de expresión artística y social.
Can Mario: escultura viva en Palafrugell
A pocos kilómetros de allí, en el Baix Empordà, Can Mario es otro de los museos de la Fundación.
Este espacio, inaugurado en 2004, ocupa un antiguo edificio industrial del siglo XIX, que en su origen fue un almacén de corcho, símbolo de la tradición industrial de la zona. Hoy, Can Mario se ha transformado en un referente cultural dedicado exclusivamente a la escultura contemporánea.
El museo alberga una colección permanente de más de 300 esculturas creadas por artistas catalanes y residentes en Cataluña desde la segunda mitad del siglo XX hasta la actualidad. Las piezas reflejan la diversidad y la innovación del lenguaje escultórico contemporáneo.
Junto con su colección permanente, Can Mario ofrece interesantes exposiciones temporales donde descubrir nuevas propuestas artísticas locales. El museo también cuenta con un jardín de esculturas y actividades culturales que enriquecen la experiencia. Un lugar donde la creatividad y la tradición industrial se encuentran.
Compromiso, identidad y territorio
La Fundación Vila Casas cree en el arte como forma de diálogo y expresión. Sus museos no solo exhiben obras: también tejen lazos entre creadores, visitantes y comunidades. En un mundo que va demasiado rápido, sus espacios invitan a detenerse, mirar con calma y reconectar con lo esencial.