Para Basagoiti el arte es motor de cambio y herramienta de reflexión. por esto, da vida a formas abstractas que buscan expandir las fronteras de nuestro imaginario. Sus esculturas no son un mero objeto sino que responden a un proceso de experimentación e investigación intuitivo. «El trabajo del artista es materializar lo imposible.»
Es también uno de los fundadores del Espai Tónic, un taller y centro de investigación artística autogestionado que se está convirtiendo en todo un referente del arte contemporáneo en el Empordà. Situado en una antigua fábrica de cerámica de Vulpellac y estrechamente vinculado al territorio, establece un vínculo directo entre artista y público. Organizan mayoritariamente exposiciones, pero también programan presentaciones de libros, espectáculos de danza, debates y algún concierto.
Como artista, actualmente trabaja en dos proyectos diferentes pero estrechamente vinculados: Expansión y Tondos. El primero, lo conforman enormes seres de formas topológicas, esculturas de aire y caucho que respiran por invitarnos a cuestionar la percepción de la realidad a través de nuestras emociones. El segundo, bautizado con el nombre que reciben las pinturas de formato circular, consiste en sustraer literalmente un fragmento de la pared. Ejercicio poético que pide un esfuerzo físico extremo, y despierta un imaginario de historias posibles. Estos muros abandonados, ruinas de un pasado reciente, reavivan gracias a la carga poética del acto de taladrar y se convierten en un escenario donde se proyecta la vida misma.
Madrid, 1972) Vulpellac
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FB Guillermo Basagoiti Brown
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